Algunas personas afirman haber visto fantasmas. A nivel mundial, millones afirman haber visto algún tipo de manifestación fantasmal por lo menos una vez en su vida. Si bien hay evidencia de que nuestros cerebros tienden a ver fantasmas, la apariencia que cada uno de nosotros puede llegar a ver es diferente. Si tienes curiosidad por los fantasmas, tienes que leer este artículo, fantasmas y religiones.
Según los historiadores que estudian y recopilan los avistamientos de fantasmas de año en año, los fantasmas se presentan en muchas formas. Algunos fantasmas perturban a determinadas personas, aparecen en sueños o aparecen de repente. Otros están presentes en determinados lugares y molestan a las personas que llegan a ese lugar. Otros parecían personas que habían muerto.Y también hay fantasmas que existen como poderes sobrenaturales que son ruidosos y causan problemas.
¿Cuál es la explicación detrás de esta diversidad de fantasmas? ¿Es cierto que algunas personas pueden ver mejor los fantasmas?
Fantasmas y religión
Resulta que los antecedentes religiosos juegan un papel aquí. La religión puede reducir el miedo Algunos estudiosos sostienen que la religión evolucionó hasta convertirse en una herramienta para controlar el miedo, una forma fácil de deshacerse de la incertidumbre que rodea a una de las cosas que creemos que es la más terrible: la muerte.
Casi todas las religiones proporcionan una explicación de lo que sucede después de la muerte, proporcionando certeza de que la muerte no es el final. De hecho, existe evidencia de que las personas profundamente religiosas tienen menos miedo a la muerte.
Protestantes, católicos y musulmanes creen en la resurrección y el juicio cuando nuestras almas son llevadas al cielo (" Jannah "en el Islam) o al infierno, dependiendo de lo que hicimos en la vida.
Los católicos también creen que hay un refugio temporal (purgatorio), un lugar para que la gente pague por los errores porque no merecen ir al cielo pero no tienen muchos pecados para ir al infierno. Los budistas e hindúes creen que existe un ciclo de muerte y reencarnación que puede conducir a un estado espiritual permanente siempre que actuemos correctamente en cada vida que vivimos.
Incluso las creencias judías, que no se centran en cosas posteriores a la muerte, también creen en una vida después de la muerte. Al obedecer reglas claras, estos adherentes pueden tener el control: saben qué hacer, para que después de su muerte se beneficien.
La capacidad de la religión para aliviar nuestras preocupaciones sobre la muerte puede tener el efecto de aumentar la sensibilidad hacia los fantasmas, espíritus y otros seres espirituales. Pero depende de la religión que sigamos.
La evidencia disponible sugiere que aquellos que dicen ser religiosos, pero rara vez asisten a la iglesia, tienen el doble de probabilidades de creer en fantasmas que aquellos que dicen ser religiosos y que son profundamente religiosos. La mayoría de las religiones tienen sus respectivos profetas, dioses, espíritus, ángeles y milagros, por lo que las enseñanzas religiosas tendrán un efecto en la apariencia que se ve.
Las enseñanzas religiosas determinarán si el visitante oculto es un invitado aceptable o no, y también afectará quién creemos que es el visitante oculto. En los católicos medievales de Europa, por ejemplo, los fantasmas eran considerados las almas de las personas que fueron atormentadas en el Purgatorio por sus pecados. Sin embargo, durante la Reforma Protestante, debido a que los Protestantes creían que el alma iría directamente al cielo o al infierno, se pensaba que los eventos ocultos eran causados por ángeles, demonios u otros seres sobrenaturales.
Los católicos creen que Dios puede permitir que los muertos visiten la Tierra, pero las autoridades de la iglesia prohíben actividades sobrenaturales como convocar a los espíritus de los muertos o jugar a la quija. En algunas religiones, como el vudú, los espíritus y los fantasmas tienen un papel importante que desempeñar. Religiones como el budismo y el hinduismo creen en fantasmas, pero los fantasmas no tienen un papel importante en la vida religiosa.
Para los hindúes, los fantasmas son las almas de personas que murieron debido a la violencia o personas que no fueron enterradas de manera adecuada y ritual.
Un fantasma para los budistas es una persona reencarnada que está liberando mal karma. Los musulmanes no creen que los muertos puedan venir como fantasmas, por lo que para los musulmanes los fantasmas son obra de los genios, seres que tienen elementos tanto espirituales como físicos, y tienen buenas o malas intenciones según la situación.
Hay varias otras religiones, como los testigos de Jehová, que también creen que las apariciones de fantasmas son disfraces de demonios, no espíritus de muertos. Por lo general, al judaísmo se le prohíbe participar en actividades sobrenaturales relacionadas con los muertos, y no existe un consenso claro sobre los fantasmas en la enseñanza judía.
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